¡Bienvenido a mi blog!

Ya que estás aquí déjame presentarme adecuadamente. Mi nombre es David, soy padre de una hermosa niña, esposo de una maravillosa mujer, enamorado de la cocina, amante de las nuevas tecnologías, gran aficionado al baloncesto, madrileño por nacimiento y convicción, madridista impenitente, jugador de mus, financiero de profesión, cocinero autodidacta, y.... 

Bloguero por casualidad. 

¿Un blog?, ¿Por qué?. Porque es la forma más sencilla de compartir con todo el mundo una de mis pasiones, la cocina, y de paso ayudarme.

Y es que desde hace ya bastante tiempo tenía una asignatura pendiente en mis aventuras gastronómicas, y no era otra que la de apuntar. Sí, apuntar de una vez por todas esas recetas que aparecen en mi imaginación en cualquier momento, se materializan de inmediato, se degustan al tiempo pero pronto pasan al olvido gracias a mi enorme desdén. De esa inquietud nace este blog. 

Aquí encontrarás tanto recetas originales como otras ya realizadas pero siempre con un nombre largo y apetecible, mi toque personal y unas fotos horribles que prometo ir mejorando con el paso del tiempo.

Pretendo que el blog Échale Fogones a la Vida sirva para conocer mis recetas, compartir mis experiencias y animar a todo el mundo a eso.... A echarle arrestos y atreverse a cocinar, disfrutar con ello y encontrar esa personal satisfacción después de un trabajo bien hecho. 

Y es que no lo neguemos, la comida es un verdadero placer que hay que cultivar, mejorar y sobre todo aprovechar, y no hay mejor manera que hacerlo que con los seres queridos. Así que os animo a todos a usar lo que aquí publique para esos momentos. 


No voy a añadir aquí nada más; para eso están las entradas que iré publicando. Tan sólo quiero despedirme agradeciendo a mi mujer Ana la ayuda que me ha prestado organizando las recetas y sobre todo dando un recital de memoria al recordar todas ellas.

David.